"Tú eres muy mona, puedes tener a tu lado al hombre que quieras"....
En las últimas semanas he oído esas palabras más veces de las que mis manos pueden contar sin llevarse una, alguna que otra vez casi sin venir a cuento (supongo que intentan ser una suerte de consuelo), pero sinceramente, ni siento que sea así, ni querría que así fuera.
Lo segundo es porque no me gusta pensar en un 'tipo universal', lo que haría que yo u otra fuera buena para todos los chicos, porque prefiero pensar que siempre hay un roto para un descosido y que todos, altos, bajos, gordos y flacos tenemos alguien por ahí para quienes somos PERFECTOS.
Y lo primero no es porque toda esta movida de los últimos 2 meses me haya dejado la autoestima abollada, ni que me sienta mayor y ya nadie me va a volver a querer o a querer comprometerse conmigo y para nada es que sienta que nunca voy a volver a ser capaz de dar todo el amor, el cariño, las caricias y la ternura que tengo dentro, es simplemente lo que mis ojos y mis oídos recogen continuamente de mis vivencias anteriores y de las vivencias de todas las mujeres maravillosas de las que afortunadamente me rodeo: no importa lo que tengas que aportar en una relación, no importa lo que valgas como persona y como mujer, la mayoría de los hombres, aunque no tengan ni la mitad de valor como ser humano que tú (ya ni te cuento como pareja), se van a sentir presas en este juego de caza que nos ha impuesto la sociedad moderna y a mi, es que me da pereza.
Sólo de pensar en empezar de nuevo, entregar mi alma y mi piel (sea por el orden que sea) a un hombre y a sus ritmos, me da flojera mental y casi física.
Así que no, no creo que pueda tener a cualquier hombre que quiera a mi lado, sea o no mona, valga o no valga, porque para tener a alguien al lado hay que esforzarse, hay que ser comprensivo, hay que aceptar a la otra persona, hay que limar asperezas, hacer pactos, en fin lo que viene siendo currárselo, en definitiva y yo...
Lo segundo es porque no me gusta pensar en un 'tipo universal', lo que haría que yo u otra fuera buena para todos los chicos, porque prefiero pensar que siempre hay un roto para un descosido y que todos, altos, bajos, gordos y flacos tenemos alguien por ahí para quienes somos PERFECTOS.
Y lo primero no es porque toda esta movida de los últimos 2 meses me haya dejado la autoestima abollada, ni que me sienta mayor y ya nadie me va a volver a querer o a querer comprometerse conmigo y para nada es que sienta que nunca voy a volver a ser capaz de dar todo el amor, el cariño, las caricias y la ternura que tengo dentro, es simplemente lo que mis ojos y mis oídos recogen continuamente de mis vivencias anteriores y de las vivencias de todas las mujeres maravillosas de las que afortunadamente me rodeo: no importa lo que tengas que aportar en una relación, no importa lo que valgas como persona y como mujer, la mayoría de los hombres, aunque no tengan ni la mitad de valor como ser humano que tú (ya ni te cuento como pareja), se van a sentir presas en este juego de caza que nos ha impuesto la sociedad moderna y a mi, es que me da pereza.
Sólo de pensar en empezar de nuevo, entregar mi alma y mi piel (sea por el orden que sea) a un hombre y a sus ritmos, me da flojera mental y casi física.
Así que no, no creo que pueda tener a cualquier hombre que quiera a mi lado, sea o no mona, valga o no valga, porque para tener a alguien al lado hay que esforzarse, hay que ser comprensivo, hay que aceptar a la otra persona, hay que limar asperezas, hacer pactos, en fin lo que viene siendo currárselo, en definitiva y yo...
yo es que estoy muy perezosa.